Cuando llegué a “Manuel Gutiérrez & Hijos y Asociados” me aseguraron que de forma temporal estaría a prueba. Pero, sí tal como ponía mi currículum, cumplía las expectativas, pronto sería socio.
Para codearme con la élite del despacho acepté su invitación a jugar al golf. No tenía ni idea, pero no debía de ser difícil darle a la pelotita. Acudí a la mejor tienda de deportes y me agencié con todo lo necesario, incluso un neceser para las cosas de aseo. El club tenía sauna y masaje.
Ha pasado un mes desde aquel día. Lo maldigo. Todos mis sueños salieron volando junto con mi hierro 9 cuando intenté darle a mi primera bola, con tan mala fortuna, que se estrelló en la cabeza de D. Manuel.
Ahora el bufete se llama Hijos de Gutiérrez & Asociados. Yo estoy encausado por homicidio y no soporto el calor de esta celda.
Bonito y con una excelente dosis de humor. Felicidades.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias, Rafael, de vez en cuando hay que poner algo de humor en nuestras vidas, aunque a D.Manuel e hijos no creo que les hiciese mucha gracia, jajaja
EliminarUn abrazo.