Se disolvieron en la noche bajo una bruma de amargura. Se dieron el último beso. Se dijeron el último te quiero. Era un hasta siempre. Un ojalá con la sensibilidad a flor de piel. Ya no habría más caricias a escondidas ni miradas ni reproches ni llorar por los murmullos que causaba su unión. Tal vez, el vacío era su única esperanza. Estaban cansadas de ocultarse como ladronas que han cometido un robo, y esperar el perdón de la justicia. Por eso, aquella noche, cuando sus latidos se aceleraron, dieron el salto final para estar juntas para siempre.
Las palabras son: SENSIBILIDAD / UNIÓN / ESPERANZA / ROBO / JUSTICIA
Fotografía de Ron Dillon
Que el amor pueda ser libre siempre, sin esconderse, sin normas, sin más actor que los actores.
ResponderEliminarUn abrazo