Aquel día de enero todo el mundo pasaba de mí. Mis padres no me querían ni ver. Los familiares y amigos que llegaban a casa, entraban al salón, directamente los saludaban a ellos y luego contemplaban a mi hermana. Incluso algunos cuando se quitaban la ropa de abrigo que llevaban, la lanzaban sin miramientos sobre el sofá, sepultándome bajo abrigos, bufandas, gorros y guantes.
Mamá siempre nos dijo que jamás jugásemos a eso en invierno, pero yo nunca imaginé que el globo lleno de agua, que le lancé a mi hermana desde la ventana, le iba a partir la cabeza.
(Este relato está escrito para el #viernescreativo de Ana Vidal, en esta ocasión había que ambientar el relato en Oymyakon, Siberia (Rusia), el lugar más frío del mundo)
Fotografía de Oymyakon, Siberia (Rusia)
Auch doloso y frío relató, el desenlace es inesperado, da un giro al relato, felicidades Javier
ResponderEliminarEdith, muchas gracias por tu comentario y tu visita al blog.
EliminarUn abrazo.