Aquel día de playa fue diferente. Al meterme en el agua sentí romperse mi piel. Sentada en la arena comprobé que tenía varias púas de erizo clavadas en la planta del pie. Eso fue la génesis de todo. Como pude y mareada logré alcanzar la posta sanitaria. Allí estaba él: camiseta ajustada, bañador azul, aquella mirada... ¡Ojalá me hubiese lesionado antes!
Tumbada sobre la camilla comenzó a trabajar con unas pinzas. Entonces, agarré lo primero que encontré para soportar tanto dolor. Al final se escuchó un tremendo bramido. No fui yo. Mi mano estrujaba salvajemente la entrepierna de mi salvador.
Las palabras son:ERIZO / GÉNESIS / ALCANZAR / AZUL / BRAMIDO
Por lo general las entrepiernas son muy castigadas
ResponderEliminarjajaja, muy bueno. Ese génesis, tan doloroso, es un accidente de playa que hace ver las estrellas, las de tecnicolor. No era de extrañar el bramido del médico ante la reacción dolorosa de la mujer.
ResponderEliminarUn abrazo
Muchísimas gracias por tu comentario.
EliminarBesos.
Muchas gracias por tu comentario, Julio David.
ResponderEliminarUn abrazo